Aunque la joven es conocida por su polémica vida, se ha desarrollado en la industria del espectáculo y los negocios
Frida Sofía, hija de la cantante Alejandra Guzmán, es conocida por su polémica vida frente a las cámaras y las redes sociales, donde suele hablar sobre su vida; sin embargo, lo que pocos conocer de la joven es que, desde hace varios años construyó su propio camino, lejos de su familia, aunque siguiendo en el ámbito del espectáculo y los negocios.
Cuando participó en el programa «Mira Quién Baila ¡La Revancha!», Frida Sofía dejó claro que el baile no es sólo una disciplina, sino una parte esencial de su vida.
“Desde chiquita bailo ballet y me enseñó a expresarme con el cuerpo. Pónganme salsa, tango, tap, contempo, ballet, lo que prefieran, hasta reggaetón”, declaró en ese momento.
Representando a la fundación NAMI, enfocada en la eliminación del estigma asociado a las enfermedades mentales y aunque no logró avanzar a las rondas finales, ya que abandonó la emisión, fue una figura destacada: “Soy de las que me amas o me odias, pero de que te vas a acordar de mí, te vas a acordar”.
Más allá del espectáculo, ya siendo residente en Estados Unidos, diversificó su carrera y se lanzó como empresaria bajo la marca “Frida Sofía, La Loca Inteligente”.
Entre sus proyectos destacan:
Joyería. Una colección de anillos, pulseras, aretes y collares diseñados para complementar cualquier look. Las piezas se caracterizan por su versatilidad y estilo moderno.
Cuidado de la piel. Frida también se ha involucrado en la industria de la belleza con productos para el cuidado facial, incluyendo cremas y masajeadores, con el objetivo de ayudar a sus clientes a rejuvenecer y mantener un aspecto saludable.
Lentes de contacto. Su línea más reciente, CRY SEE, ofrece pupilentes en una variedad de colores como Oasis, Olive y Polaris, que permiten cambiar el color de los ojos y dar un toque único al estilo personal.
Su vida marcada por la controversia
La relación entre Frida Sofía y su madre, Alejandra Guzmán, ha estado en el centro de la atención mediática debido a conflictos familiares que se han hecho públicos. Las acusaciones que Frida hizo contra su abuelo Enrique Guzmán por abuso sexual y la defensa de Alejandra hacia su padre generaron una ruptura que, hasta ahora, parece irreparable. Incluso en momentos críticos, como la reciente muerte de Silvia Pinal, la reconciliación entre madre e hija solo se dio brevemente a través de una llamada.
POR: EL UNIVERSAL