Oscar Ballesteros
Santos Juárez Chávez es un adulto de 78 años que tras sufrir una embolia quedó discapacitado y con la necesidad de una sonda urinaria; su condición de necesidad se ve incrementada debido que su residencia se encuentra en la colonia Las Moritas, zona que carece de los servicios principales y las construcciones del lugar no gozan de las mejores condiciones.
La cuestión acerca de cómo sobrellevaría los días fríos que se avecinan, sólo era otra dificultad en su día a día “así como me miras, tirado, yo soy una persona discapacitado y ayudas no tengo ninguna (…) estamos a la pura bendición de Dios”, comentó Santos quien es atendido por su hija debido a que su movilidad es totalmente nula.
Sus necesidades, superan únicamente la carencia de materiales para mejorar la infraestructura de su hogar o una cantidad extra de cobijas, debido a que él, tiene una cantidad muy limitada en sus ingresos que provienen de la pareja de su hija quien labora como albañil y con eso apenas basta para hacer ‘la notita’.
Dijo que, si bien en el sector han llegado apoyos, por su condición él se ha visto desfavorecido ya que los vecinos acaparan los beneficios a su llegada y jamás se ha visto apoyado, “vienen pero allá las recogen toda la gente gaviotas y para acá contigo no llegan nunca” comentó.
Además de esto, una despensa que se les había otorgado, señaló también se ha visto intervenida por la vecina encargada de distribuirla por lo que también ha dejado de percibir dicho apoyo.
Ante esto, comentó son muchísimas las áreas en donde la población podría apoyarlo debido a que desde el mandado, medicamentos y artículos para pasar el frío son su necesidad, ya que no perciben ningún recurso.
Su hogar se ubica en la calle José García 114 de la colonia antes mencionada, donde dijo que siempre puede ser encontrado e invitó a quienes gusten apoyarlo pueden acudir a corroborar en las duras condiciones en las que tiene que sobrevivir.